viernes, 4 de julio de 2008

Chamela


"El origen de la exixtencia es el movimiento. Esto significa que la inmovilidad no puede darse en la existencia, pues, de ser ésta inmóvil, regresaría a su origen: la Nada. Por esta razón, el viaje no tiene fin, tanto en el mundo superior como en el mundo inferior".


"Quien viaja continuamente nunca para en el mismo sitio -visto desde su perspectiva- y, por lo tanto, siempre está ausente -desde la perspectiva de los demás, de los amigos-. Y es que, para ti mismo, estás en efecto "en otro sitio", es decir, no estás, aunque en realidad si estás, es decir, estás en ti mismo".
(Cees Nooteboom)


Así, puedo estar en cualquier sitio, el viaje nunca se detiene, no se sabe cuando comienza ni cuando se ha llegado, solo se sabe el movimiento, sucediendo a cada instante. Viajar para conocerse a uno mismo.

El viaje es contemplación, y lo que se aprende durante el camino permanece en la memoria del alma como tatuaje insondable sobre la piel quemada. Así recuerdo, caminando durante horas sobre la tierra, rodeada de hierba tan abundante como el misterio inquietante creciendo en su savia. Avanzando sin saber a dónde llegaré, alejándome cada vez mas de la carretera, "sigue derecho y en un momento dado la tierra se transformará en arena, entonces en apróximadamente 20min, lo encontrás"


Desde aquel día, pienso que no importa el tiempo ni la distancia, menos el sudor y el cansancio, siempre, detrás de la montaña, se encuentra el mar...
(V)

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